Gasto reembolsable

 

¿Qué es un gasto reembolsable?

Es un gasto a nombre del proveedor, pero que corre a cuenta del cliente. Debe facturarse con IVA y, si procede, con retención. 
 
Determinados, autónomos o empresarios facturan algunos gastos derivados de su actividad a su cliente. Dichos gastos, cuando van a nombre del proveedor, reciben el nombre de gasto reembolsable.


Diferencias entre gastos reembolsables y gastos suplidos

No debe confundirse un gasto reembolsable con un gasto suplido. Este último es un gasto de distinta naturaleza y que se diferencia del gasto reembolsable en que va a nombre del cliente, no del proveedor.

Un ejemplo de gasto reembolsable serían gastos de luz e internet de un autónomo que reembolsa a su cliente. Un gasto suplido sería, por ejemplo, los gastos de notaría que una gestoría abona por anticipado para su cliente.

En el primero, los gastos van a nombre del proveedor; en el segundo, a nombre del cliente.

Esta diferencia también afecta a la facturación de los gastos reembolsables y de los gastos suplidos.