Comisión bancaria

 
¿Qué es una comisión bancaria?

 Todo producto financiero, tiene costos asociados. Los bancos se encuentran autorizados por ley para cobrar comisiones por las cuentas corrientes bancarias, pudiendo fijar libremente el monto y oportunidad de cobro, siempre que informen anticipadamente a los clientes de esta circunstancia, especialmente cuando se trate del establecimiento de comisiones o del incremento de las ya existentes, a fin de que éstos puedan resolver sobre la conveniencia de continuar utilizando tales servicios bajo las nuevas condiciones.

En todo caso, los planes de cobro de comisiones que fijen los bancos no pueden contener discriminación alguna entre clientes que se encuentren en igual situación, pudiendo aplicarse sólo después de que sean comunicados por escrito a los titulares de cuentas corrientes. Esta comunicación es generalmente dirigida al domicilio que el cliente tiene registrado en el banco, por lo que resulta conveniente mantenerlo actualizado.

En consecuencia, tener una cuenta corriente implica costos asociados a su mantención, cuyo valor generalmente depende del saldo promedio que tenga la cuenta.

Adicionalmente, son cargadas a la cuenta corriente comisiones asociadas a la contratación de otros productos como la Tarjeta de Débito que le permite girar dinero del cajero automático y hacer pagos; la Línea de Crédito que genera comisiones por apertura y renovación, en la que normalmente el cliente contrata voluntariamente un seguro de desgravamen.

Finalmente, pueden generarse cobros relacionados con servicios especiales prestados por el Banco, tales como solicitud de cartolas adicionales, envío de talonarios a domicilio, copias de cheques, etc.


Comisión bancaria y comisión financiera

Comisión bancaria y comisión financiera no son conceptos intercambiables. Si bien una comisión financiera es una comisión bancaria, no todas las comisiones bancarias son comisiones financieras.

Las comisiones financieras están ligadas a los costes de financiación de un préstamo o crédito, el impago de deudas o la emisión de bonos. Son una clase de comisión bancaria, pero no comprenden todas las comisiones bancarias.

Las comisiones bancarias de servicio - generalmente, y por economía lingüística, se conocen simplemente como comisiones bancarias - son aquellas que hacen referencia a las cantidades que se cobran por los servicios regulares que ofrece un banco: administración de una cuenta bancaria o de una tarjeta de crédito o los costes aparejados al cambio de divisas o a la emisión de transferencias.